La población de Santa Catarina Juquila, en el actual estado de Oaxaca, fue fundada alrededor del año 1272. De acuerdo con textos de gran antiguedad, la población primera que tuvo el lugar fue de origen mixteco. Estos indígenas se asentaron en las orillas de un gran río que les brindaba todo lo necesario para que se lograra un adecuado desarrollo.
Fue entonces que se incrementó la población de la actual Juquila. Muchos años más tarde, alrrededor de 1725, por su relevancia religiosa y turística a la población se le nombró como cabecera municipal.
Hoy por hoy Santa Catarina Juquila cuenta con una creciente dinámica turística, al grado que ha conseguido la declaratoria de Pueblo Mágico de México. Con ello se ha enriquecido notablemente la oferta vacacional del territorio oaxaqueño.
Juquila está considerado como uno de los focos de veneración religiosa más relevantes de la nación mexicana. No obstante, las opciones de esparcimiento y disfrute turístico que nos ofrece este Pueblo Mágico van mucho más allá de ello.
De entrada, estando de paseo por estos rumbos del sur del país, es indispensable visitar el Santuario de la Inmaculada Virgen de Juquila. Es por este noble templo que la comunidad ha destacado como imperdible destino para el turismo religioso.
Por lo anterior, cuando se tenga la oportunidad de conocer esta comunidad, es indispensable acercarse a este importante foco de veneración religiosa. El Santuario de la Inmaculada es una bella construcción construida en el siglo XVIII. En su interior se atesora una representación escultórica de la Virgen que según los lugareños tiene fama de milagrosa.
Hay opciones ecoturísticas en la periferia de Juquila que ameritan ser aprovechadas al máximo. Ejemplo de lo anterior es Chorro Conejo, una impresionante cascada que tiene una altura de treinta metros. Así también hay varias fosas de aguas cristalinas ocultas entre denso bosque. Estamos ante una zona perfecta para gozar de almuerzos campestres.
También es interesante visitar el Río Olla, otro de los tesoros naturales en la zona de Juquila. Los turistas gozan a lo grande al realizar chapuzones en las frías aguas de este balneario silvestre.
Resulta inolvidable pasar allí largas jornadas de relajación, escuchando el canto de los pajarillos y el rumor incesante del agua.
Juquila es uno de esas sencillas comunidades de provincia que los amantes de la naturaleza y el folclor desearán visitar durante sus vacaciones. Estamos ante un fascinante Pueblo Mágico rodeado por las cumbres de la Sierra Madre del Sur.
El místico ambiente de Santa Catarina Juquila recibe anualmente a un numero cercano a los dos millones de personas deseosas de visitar este centro religioso del sur del país.
Todos esos peregrinos llegan a Juquila con el deseo de venerar a la Juquilita, que es el modo en el que se nombra también a la Virgen de Juquila.
A unos diez minutos del Pueblo Mágico que les comentamos se encuentra un sitio llamado El Pedimento. Es allí en donde la meditación y la reflexión de los creyentes cobra una dimensión insospechada. Es otro de los lugares imperdibles para todos quienes pasan sus vacaciones en Puerto Escondido y disfrutan de un tour en el Pueblo Mágico de Santa Catarina Juquila.
Una de las mejores alternativas turísticas que se tienen al visitar este Pueblo Mágico oaxaqueño es la exploración culinaria de sus antojitos más tradicionales. Cada visita a Juquila nos da la oportunidad de saborear lo mejor de la gastronomía oaxaqueña.
De entre las muchas delicias que les aconsejamos degustar en este pueblo destacan las chicatanas, los chiles rellenos, las enchiladas de mole (o coloradito como allí se le conoce), el siempre suculento pozole y las patitas de cerdo en vinagre.
Pero para los viajeros que son vegetarianos también hay alternativas gastronómicas disponibles en Juquila. En este caso no solo son saludables y nutritivos, sino también muy sabrosos los nanacates, hongos que crecen por estos rumbos de Oaxaca y los bocadillos preparados con coco y panela.
Como complemento, nada mejor que el chocolate con agua y el siempre grato atole.
Una manera muy grata de llevarse un pedacito de Juquila de vuelta a casa tras las vacaciones es adquirir artesanías. Es entonces que vale la pena explorar la importante tradición artesanal de este Pueblo Mágico, el modo en el que las diestras manos de los maestros artesanos de la zona transforman trozos de madera en magníficas figuras de la Virgen.
Así también, es aconsejable conocer las técnicas para bordar con chaquira en algunos de los típicos y coloridos diseños de la zona. Varios de ellos son usados en el famoso evento folclórico de la Guelaguetza. Así que la compra de artesanías en Juquila no solamente es un modo de conseguir bellas prendas, adornos y recuerdos, sino que también es un valioso apoyo para la economía de la zona.
La oferta hotelera de Juquila es bastante completa, con sitios de alojamiento al alcance de todos los bolsillos. Una opción recomendables es la Posada Juquilita, ubicado muy cerca del Santuario de la Virgen. Es un sitio de hospedaje económico e higiénico para descansar con plena comodidad y seguridad.
También son opciones adecuadas para quedarse en Santa Catarina Juquila lugares como Casa Francesca, La Casa de León y Pueblo del Sol- Eco Lodges.
Para llegar al Pueblo Mágico de Juquila en coche se debe seguir la autopista número 150 justo en el tramo México- Puebla. Posteriormente hay que seguir por el entronque con la llamada Super carretera Cuacnopalan-Oaxaca, y seguir por ella hasta llegar a la capital oaxaqueña. El tiempo de traslado es de aproximadamente cinco horas.
Posteriormente de la ciudad de Oaxaca hasta Santa Catarina Juquila son otras cinco horas de camino. Además conviene saber que para visitar este Pueblo Mágico y Juquila se usa la misma carrertera, aunque al arribar al paraje conocido como El Vidrio debe de seguirse un desvío que nos lleva hasta Juquila, a unos 90 kilómetros antes de llegar a Puerto Escondido.