Zona arqueológica de Los Melones, Estado de México
La zona prehispánica de Los Melones (Ahuehuetitlán) en el Estado de México, aparece en la zona donde alguna vez se levantaba el palacio del monarca texcocano Nezahualcóyotl.
Es uno de los escasos conjuntos de vestigios relacionados con la antigua Acolhuacan. En este yacimiento prehispánico se hacen patentes las fases Coyotlatelco, Tollan y Azteca III, lo cual arroja una periodicidad que va del año 600 al 1521 d.C.Los Melones nos muestra, restos de uno de los muchos edificios que integraban la ciudad de Texcoco, mencionada por Cortés en una de sus cartas de relación, fechada en 1520.
El sitio prehispánico que les recomendamos abarca un conjunto arquitectónico de pequeñas dimensiones, con un templo y dos basamentos grandes levantados con adobe, aplanados con estuco y recubiertos con mampostería. Tales vestigios evidencian el uso constructivo que hacían los antiguos texcocanos de grandes bloques de piedra labrada. Revelan técnicas arquitectónicas particulares de la región, muy valiosas.En términos generales, este yacimiento prehispánico tiene una gran relevancia porque nos permite conocer algo más de la urbe mesoamericana de Texcoco.
De entre lo que puede observarse al visitar Los Melones, destaca los restos de un templo y dos basamentos que tiene muros de adobe, aplanado con estuco y mampostería.Qué visitar en el sitio arqueológico de Los Melones
Este yacimiento mexiquense está conformado por dos estructuras principales de gran tamaño y algunos restos de otros edificios.
El conjunto localizado al oriente del sitio exhibe restos de escalinatas y una superposición de construcciones de piedra y adobe. En la parte superior del conjunto se observan pisos de estuco, trazos de columnas y bases de muros que aluden a la construcción de un edificio de grandes proporciones. En lo que se refiere al sur, pueden apreciarse una estructura pequeña de dos cámaras, pisos con estuco y planteados en niveles distintos. En la parte poniente del sitio arqueológico de Los Melones, hay otro montículo conformado por vestigios de un sistema de drenaje y canales de estuco.La zona arqueológica de los Melones o el también llamado Palacio de Nezahualcóyotl se localiza en la calle de Abasolo.
Se dice que el palacio que se levantaba en este lugar tenía unas 300 recámaras, 5 patios con hermosos jardines y varias fuentes monolíticas. También incluía un juego de pelota, un oratorio y hasta un tianguis. Recordemos que Texcutzinco fue una construcción erigida por el monarca Nezahualcóyotl para su descanso y esparcimiento, incluía un zoológico y un jardín botánico, los cuales están considerados como los primeros en Mesoamérica. Con respecto a los célebres baños reales de Nezahualcóyotl, se trata de un conjunto arqueológico estrechamente relacionado con Los Melones. Quienes visiten este lugar podrán conocer las tinas, una escalinata y restos de un antiguo acueducto.Cómo llegar al sitio arqueológico de Los Melones
Se puede conocer este yacimiento, llegando por la carretera México-Texcoco hasta Texcoco y desde este punto siguiendo la calle Juárez Sur hasta la de Abasolo.
Justo a la derecha aparece el sitio arqueológico de Los Melones.Información relevante acerca del sitio arqueológico de Los Melones
El sitio lleva ese nombre por el lugar en donde se localiza: el Cerrito de Los Melones.
Los visitantes deben pagar un módico acceso al sitio, el cual puede ser visitado de martes a domingo de 10 de la mañana a 5 de la tarde. Existen visitas guiadas que se agendan de manera previa en las oficinas del INAH en el Estado de México.Actividades a realizar en el sitio arqueológico de Los Melones
Recomendamos aprovechar la visita a la bella ciudad de Texcoco, para conocer atractivos locales, como la Catedral, la Casa del Constituyente, el Parque Nacional Molino de Flores o bien, en las cercanías, la pintoresca comunidad de Chapingo, donde se atesoran valiosas obras realizadas por el famoso muralista Diego Rivera.
Es importante mencionar algunas fiestas populares de Texcoco, como la que se efectúa el 13 de junio en honor de San Antonio de Padua, la del Señor de la Presa, que se realiza en el Parque Molino de Flores y la Feria Internacional del Caballo, cerca de la Semana Santa.
Esta última incluye una gran exposición agrícola, industrial, ganadera, artesanal y comercial, así como también charreadas y palenques.