El Programa de los 177 Pueblos Mágicos de Mexico, desarrollado por la Secretaría de Turismo en colaboración con diversas instancias gubernamentales y gobiernos estatales y municipales, contribuye a revalorar a un conjunto de poblaciones del país que siempre han estado en el imaginario colectivo de la nación en su conjunto y que representan alternativas frescas y diferentes para los visitantes nacionales y extranjeros. Más que un rescate, es un reconocimiento a quienes habitan esos hermosos lugares de la geografía mexicana y han sabido guardar para todos, la riqueza cultural e histórica que encierran.

Zona arqueológica de Cholula, Puebla

Nota sobre Zona arqueológica de Cholula, Puebla

Ubicado a tan solo siete kilómetros al oeste de la vibrante ciudad de Puebla, el sitio arqueológico de Cholula es uno de los yacimientos más fascinantes y antiguos de México. Enclavado entre los municipios de San Andrés Cholula y San Pedro Cholula, este lugar ha sido resguardado como área protegida por las autoridades mexicanas debido a su inmenso valor histórico y cultural. Es un destino imperdible para los apasionados de la historia, la arqueología y la cultura prehispánica, ya que ofrece una visión única del pasado y de las civilizaciones que habitaron esta región por miles de años.

El sitio arqueológico de Cholula es un destino indispensable para quienes desean conocer más sobre la historia y las culturas que dieron forma al México antiguo. Con su imponente pirámide, su museo informativo y sus fascinantes túneles, Cholula ofrece a los visitantes una experiencia única que combina aventura, conocimiento y espiritualidad. Cada rincón de este sitio arqueológico cuenta una historia, y al caminar por sus antiguos patios ceremoniales y explorar sus profundos túneles, uno no puede evitar sentirse transportado a una época lejana en la que Cholula fue un centro vibrante de vida y cultura.

Visitar Cholula es sumergirse en el corazón de la historia mexicana, y es una oportunidad para conectarse con el pasado y reflexionar sobre el legado que estas antiguas civilizaciones dejaron atrás.

El Nombre y Significado de Cholula

El nombre "Cholula" proviene del náhuatl y significa "agua que cae en el sitio de la huida". Este nombre está cargado de simbolismo, posiblemente relacionado con eventos históricos o leyendas que rodean la región. Cholula es, además, uno de los asentamientos más antiguos de Mesoamérica, con una historia que se remonta al Periodo Clásico Superior (aproximadamente entre el 200 d.C. y el 900 d.C.). Su ocupación fue continua durante varios siglos, lo que le confiere un lugar especial en la historia prehispánica de México.

Sin embargo, la importancia de Cholula ha sido fluctuante a lo largo de los años. En algunos periodos, este sitio fue uno de los centros ceremoniales y urbanos más destacados del México Antiguo, mientras que en otros momentos su relevancia disminuyó en comparación con otros grandes centros prehispánicos como Teotihuacán o Tenochtitlán.

La Gran Pirámide de Cholula

La pieza central del yacimiento arqueológico es la Gran Pirámide de Cholula, también conocida como Tlachihualtépetl, que en náhuatl significa "cerro hecho a mano". Con una base de casi 450 metros por lado y una altura original de aproximadamente 65 metros, esta pirámide es la más grande en volumen del mundo, incluso superando a la famosa pirámide de Keops en Egipto. Sin embargo, debido a su diseño escalonado y a las modificaciones que ha sufrido a lo largo del tiempo, hoy en día puede parecer más un cerro natural cubierto de vegetación que una pirámide monumental como las de otras civilizaciones antiguas.

La construcción de la Gran Pirámide fue un proceso largo y complejo que abarcó varias fases a lo largo de los siglos. Se cree que comenzó alrededor del siglo III a.C. y continuó expandiéndose y modificándose hasta la llegada de los españoles en el siglo XVI. A lo largo de este tiempo, diferentes culturas, como los olmecas, los toltecas y los mexicas, dejaron su huella en la estructura y en las prácticas ceremoniales que se realizaban en la pirámide.

Hoy en día, la cima de la Gran Pirámide está coronada por el Santuario de Nuestra Señora de los Remedios, una iglesia católica construida por los colonizadores españoles en el siglo XVI. Esta yuxtaposición de la pirámide prehispánica y la iglesia colonial es un poderoso símbolo del sincretismo cultural que caracteriza gran parte de la historia de México.

Un Recorrido por el Sitio Arqueológico

El sitio arqueológico de Cholula cuenta con tres zonas principales abiertas al público, cada una ofreciendo una perspectiva diferente sobre la historia y el legado de este lugar. El recorrido por estas áreas es una experiencia enriquecedora que permite a los visitantes sumergirse en el pasado de esta civilización y en el contexto de su importancia.

El Museo de Sitio: La primera parada obligada en cualquier visita a Cholula es su Museo de Sitio. Este espacio cuenta con tres salas de exposición donde se exhiben piezas arqueológicas halladas en la región, algunas de las cuales datan de miles de años atrás. Entre las piezas más notables se encuentran objetos ceremoniales, esculturas, cerámica y artefactos de la vida cotidiana de las civilizaciones que habitaron Cholula. El museo ofrece una excelente introducción al contexto histórico y cultural de la zona, ayudando a los visitantes a comprender mejor la magnitud y el significado de la Gran Pirámide y los rituales que se llevaban a cabo en sus alrededores.

El Túnel de la Pirámide: Una de las experiencias más emocionantes y únicas que se pueden vivir en Cholula es el recorrido por el túnel que atraviesa el interior de la Gran Pirámide. Este túnel, de 280 metros de longitud, fue excavado por arqueólogos en el siglo XX y permite a los visitantes adentrarse en las entrañas de esta monumental estructura. El túnel está iluminado artificialmente, lo que lo hace seguro y accesible para el público. Durante el recorrido, los visitantes pueden apreciar las diferentes capas de construcción que se superponen en la pirámide, así como los restos de murales y otros vestigios que dan testimonio de la complejidad y riqueza cultural de la antigua Cholula.

La Zona Abierta del Yacimiento: La tercera y última parte del recorrido es la zona abierta del yacimiento arqueológico, donde los visitantes pueden explorar los patios ceremoniales y las estructuras que rodean la Gran Pirámide. Estos patios eran utilizados para rituales religiosos y eventos públicos, y ofrecen una visión de cómo era la vida en esta antigua ciudad. Desde esta área, también se puede apreciar una vista impresionante de la iglesia de Nuestra Señora de los Remedios en lo alto de la pirámide, así como de los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl en la distancia, que en días despejados crean un telón de fondo espectacular.

El Legado de Cholula

Cholula no solo es importante por su impresionante pirámide y su historia prehispánica, sino también por su papel como un centro cultural y religioso de gran importancia. A lo largo de los siglos, este lugar ha sido testigo de la llegada de diferentes culturas y civilizaciones, desde los olmecas hasta los toltecas y mexicas, y finalmente los españoles. Cada una de estas culturas dejó su huella en Cholula, y hoy en día, el sitio sigue siendo un símbolo de la rica herencia cultural de México.

El sincretismo religioso es otro de los aspectos fascinantes de Cholula. La coexistencia de la iglesia católica en la cima de la pirámide con los vestigios de las antiguas prácticas religiosas indígenas es un ejemplo del proceso de fusión cultural que se dio tras la conquista española. Este lugar sagrado sigue siendo un punto de encuentro espiritual para muchas personas, tanto católicas como practicantes de tradiciones indígenas.