Visita los mejores pueblos fantasma de México
Los pueblos de México de mayor atractivo turístico por lo general están llenos de vida.
No obstante, hasta los que no lo están, resultan por demás cautivadores. A lo largo de toda la extensión del territorio nacional los viajeros hallarán algunas comunidades que por distintas causas han quedado abandonados, hasta transformarse en auténticos “pueblos fantasmas”. Como petrificados en el tiempo, los pueblos fantasmas de México se proyectan como alternativas turísticas muy sugestivas, de acuerdo a lo que comentaremos en lo que sigue.Los siguientes pueblos fantasma comparten una característica especial: exponen cierto hechizo en el ambiente que los hace inolvidables para todos quienes los visitan.
Real de CatorceVestigios misteriosos de lo que antaño fuera una comunidad minera de gran esplendor, nos esperan en Real de Catorce, en el estado de San Luis Potosí.
En cuanto se agotaron los recursos mineros en plata en la región en sitio quedó vacío. Actualmente es un foco turístico muy destacado en el territorio potosino, especialmente por sus antiguas construcciones, solitario ambiente y su santuario dedicado a San Francisco, patrono de la localidad. OjuelaAhora tenemos uno de los lugares imperdibles para quienes visiten el estado de Durango.
También fue en su momento una sobresaliente población minera en la cual se obtenían grandes cantidades de magnesio, zinc, plata y oro. Una inundación acontecida en la zona obligó a los habitantes a dejar el lugar. En nuestros días las templos, calles, plazas y antiguos casinos de Ojuela, en el entorno silencioso que ahora priva allí, hacen sentir a los visitantes como en otra época. Aunado a lo anterior, cuenta con un puente colgante de cuatro siglos de haber sido construido. Guerrero Viejo Para visitar Guerrero Viejo y nuestras anteriores recomendaciones de pueblos fantasma en México les aconsejamos hacerlo en un coche rentado, el cual pueden conseguir en una agencia de alquiler de vehículos de comprobable prestigio, como Hertz. Guerrero Viejo se encuentra en el estado de Tamaulipas, muy cerca de la frontera con los Estados Unidos.En 1953 se decidió construir una presa colindante al río Bravo con el objetivo de abastecer de agua a las poblaciones cercanas de ambos lados de la frontera.
Esto derivó en que varias poblaciones cercanas a la zona tuvieran que ser reubicadas en otras regiones. Ese fue el origen de la condición de pueblo fantasma de la fascinante población de Guerrero Viejo, lugar que surgió hace aproximadamente doscientos años.