Con todo el sortilegio asociado a las tierras prometidas, el pueblo de Talpa de Allende, en Jalisco, cautiva a quienes cruzan el arco de su entrada.

Casi todos los días, las calles de Talpa se llenan de un intenso júbilo popular y los visitantes son recibidos con imágenes sacras, dulces tradicionales y deliciosa comida.

Muchos de quienes acuden a Talpa, son turistas, pero también llegan abundantes peregrinos desde más allá de la región montañosa. Todos ellos visitan, llenos de fervor, la Basílica de Nuestra Señora de Talpa, edificio construido en 1782.

Aconsejamos conocer, en la zona posterior de la Basílica, el Museo Religioso, en donde se exhiben distintas representaciones católicas y objetos relacionados con la iglesia.

Posteriormente, los turistas pueden trasladarse a la Parroquia del Señor San José, la cual fuera construida en 1858, en un área considerada como sagrada. Se cuenta que la imagen de la Virgen de Talpa, estando ya muy deteriorada, se renovó milagrosamente en tal lugar, a mediados del siglo XVII. Antes de llegar a la Parroquia del Señor San José, vale la pena visitar el Mercado Municipal, para comprar ricos rollos de guayaba o los típicos y tradicionales sombreritos de chilte.

Por esos rumbos de Talpa, se ubica el Palacio Municipal, con su soberbia fachada estilo colonial.

Es un edificio que data de 1802.

También interesante es el Museo de Artesanías, con su gran colección de piezas realizadas con cuero y madera y chilte. Antes de salir de Talpa de Allende, es indispensable explorar la Zona de Petroglifos, el Bosque de Maple y el Monumento a Cristo Rey, permanente centinela de la comunidad, localizado en el singular cerro homónimo.

En las cercanías de Talpa, se encuentra otro pueblo jalisciense aconsejable de visitar.

Es Mascota, cabecera del municipio del mismo nombre, que destaca por sus grandes áreas boscosas. Visitantes de diferentes partes del orbe acuden Mascota para aprovecharlo con fines de ecoturismo, pero también para gozar de sus múltiples atracciones culturales.

Además de la plaza principal, en Mascota sobresale el Templo de la Virgen de los Dolores, el Templo de la Preciosa Sangre- edificio inconcluso del siglo XIX-, y los museos Arqueológico Mascota, El Pedregal y Profesor Raúl Rodríguez.

En ellos, los visitantes podrán conocer antiguas fotografías, artesanías y piezas prehispánicas que nos invitan a adentrarnos en la historia de esta región de Jalisco. Para complementar este paseo por Talpa y Mascota, recomendamos explorar la Presa Corrinchis y alguna de las muchas ex haciendas y viejas casonas de esta zona del estado.