Crecimiento del 225% de inversión extranjera en bonos en mercados emergentes con respecto al mes de octubre
Principalmente por el coronavirus, muchos países del mundo que son calificados como emergentes están pasando situaciones por demás complicadas en términos económicos. Es lo que está sucediendo en México realmente, en donde especialistas indican que el PBI puede llegar a caer en promedio para el 2020 casi un 10%. Pero al mismo tiempo que eso sucede, algo se puede ver también y es que inversionistas están optando por elegir instrumentos financieros de mercados en países que son considerados “emergentes”, llegando a los 76,500 millones sólo en el mes de noviembre del presente año, lo que representa aproximadamente un crecimiento del 225% de lo que fue el mes de octubre.
En estos países que antes mencionamos se encuentran numerosos administradores de fondos que ven con buenos ojos realmente salir a buscar inversionistas directamente al extranjero, que son los que cuentan con el respaldo suficiente para colocar grandes sumas de dinero a largo plazo. Que las inversiones crezcan en los países emergentes no es una novedad, toda vez que hay varias razones para que así sea, de acuerdo a estudios que fueron realizados por el Instituto de Finanzas Internacionales (IIF). Algunas de las causas por la que esto suceda puede ser la posibilidad de tener vacuna contra el coronavirus, finalización de las elecciones en Estados Unidos, entre otras.
Si se mira en términos de Latinoamérica en conjunto, aproximadamente habrá contracción económica regional en torno al 9%, y se espera que no llegue el crecimiento también en promedio al 4% para el 2021. Por lo tanto, toda esta deuda que los gobiernos latinoamericanos emitieron en el 2020 a los fines de atravesar de la mejor manera la crisis, debe ser muy bien administrada, principalmente aquellos fondos extranjeros que ingresaron. Sin ir más lejos, se puede ver un dato con suma claridad en este 2020: hubo crecimiento del 12% de emisión de deuda en dólares por parte de gobiernos emergentes, alcanzando así números que superan los 700,000 millones de dólares. Este último dato es más que importante para quienes al buscar una inversión con el menor riesgo posible eligen adquirir instrumentos financieros “atados” a bonos en divisa estadounidense que fueron emitidos por gobiernos de países que se consideran emergentes.
Lamentablemente, el crecimiento que tuvo Latinoamérica desde el 2001 hasta el año 2021 ya no sucede. En esos años hubo crecimientos regionales que en algunos casos llegaron al 6% anual, con economías que fueron muy beneficiadas por la demanda de distintos productos (principalmente materias primas) por parte de China. Estos números ya no son así en la actualidad, por lo que los recursos de dinero son más que limitados, que se ven a su vez sumamente presionados por la cantidad de gasto público que casi todos los países en Latinoamérica tuvieron que afrontar desde el inicio de la pandemia por el COVID 19.
Resaltan los analistas económicos y financieros que será más que relevante y fundamental que los países emergentes, por medio de sus autoridades estatales, realicen una correcta y ordenada administración del dinero obtenido por emitir bonos de deuda. De esa manera podrán crecer a futuro y evitar que haya aumentos en los índices de riesgo país, algo que llevaría directamente a desalentar nuevas inversiones.