{No es sencillo para muchas personas adaptarse a este cambio tan brusco a su cotidianidad.

Las medidas de aislamiento social emprendidas en numerosos países para obstaculizar el avance del coronavirus son complicadas de tolerar para ciertos grupos poblacionales, por ejemplo, los adultos mayores. }

Si bien es cierto que la gente mayor suele ser la más sedentaria, la cuarentena estricta que se ha recomendado por parte de las autoridades sanitarias en diferentes países también suele causarles angustia y agotamiento emocional.

Es cierto que se trata de uno de los sectores poblacionales más vulnerables a las afectaciones del Covid 19, pero también se debe atender que el encierro prolongado puede afectar tanto mental como físicamente a los adultos mayores.

Los especialistas consideran que, si bien las personas mayores suelen mostrar una conducta estoica ante eventos así, por la experiencia de vida que han acumulado, también es verdad que el aislamiento casi obligatorio que las autoridades han establecido de manera temporal en ciertas naciones para impedir los contagios de coronavirus, pueden pasarle factura a la estabilidad física y psicológica de los ancianos.

Por lo anterior, es necesario aprovechar los recursos tecnológicos con los que actualmente se cuenta, como, por ejemplo, las comunicaciones vía internet, para mantener vinculado al adulto mayor con su entorno social.

También hay que invitar a nuestros adultos mayores a que practiquen la lectura de libros impresos o audiolibros; disfruten de una serie televisiva o sencillamente que descansen en su sillón para reponer fuerzas durante este periodo de cuarentena.

Los expertos mencionan que la sobreinformación acerca del coronavirus, la asimilación ininterrumpida de datos como el número creciente de contagios o fallecidos, pone a las personas en una condición de alerta desgastante y estresante, lo cual puede tener negativas consecuencias para la estabilidad mental durante el confinamiento.

Según los especialistas, transitar por un periodo de cuarentena es como experimentar el duelo por un ser querido.

Primero se experimenta enojo y hasta ira por la situación.

Posteriormente se sufre una leve depresión y algún tiempo después se comienza a valorar más lo que uno tiene a su alrededor, incluso a comparación de aquello que el confinamiento nos quitó de la cotidianidad.

Por supuesto, hay que ayudar a los adultos mayores a que no se entreguen sin más a un excesivo sedentarismo durante la cuarentena por el coronavirus.

Se deben cultivar buenos hábitos de alimentación y un frecuente ejercicio mental y físico. Eso nos ayudará a regresar poco a poco a las rutinas cotidianas conforme se supere la emergencia sanitaria por el Covid 19.