Mazamitla se encuentra en la región sureste del estado de Jalisco, y es un típico poblado de montaña inmerso en la sierra enmarcado por el lago de Chapala. El centro del pueblo se caracteriza por sus calles empedradas y sus casas de techo de teja, muros blancos y puertas de madera.

Mazamitla es un pueblo colonial pero su nombre es de origen prehispánico: significa en nahuátl "lugar donde se hacen flechas para cazar venados". Antes de la Conquista fue habitada por purépechas de Michoacán y luego adjudicada a Hernán Cortés. Al inicio de la Independencia de México, se cree que Miguel Hidalgo pasó por la región y celebró una misa en Palos Gordos, una ranchería de este municipio en donde aún se conserva un tronco de roble que se usó como altar.

Este pueblo es también la entrada a la Sierra del Tigre: en los bosques a sus alrededores se pueden encontrar cabañas de madera, disfrutar de atractivos naturales como arroyos, cascadas y verdes praderas enclavadas entre montañas, que lo vuelven un sitio perfecto para el ecoturismo.

Qué visitar en Mazamitla Pueblo Mágico

La tranquilidad del bosque, su agradable ambiente y su comida típica le dan un atractivo especial a Mazamitla; caminar por el pueblo y descubrir el encanto de sus rincones es una experiencia reconfortante. Sus rancherías cercanas ofrecen a los visitantes la posibilidad de encontrarse con un entorno rural auténtico.

Las cabañas de madera son el principal referente de su paisaje; por ellas se ha ganado el calificativo de "la Suiza Mexicana". Sobre la carretera de acceso al pueblo se encuentra aún en pie una pequeña cabaña o troje que fue construida hace más de 400 años; se cuenta entre los pobladores que esta troje fue hecha con madera de pino cortada en luna llena, pues se cree que cuando se corta en dicha fase la madera dura para siempre. Para fines de alojamiento en la zona lo mejor es reservar en cabañasen.com

Sin embargo, algo que rompe el singular entorno del Pueblo Mágico es la Parroquia de San Cristóbal, frente a la Plaza Principal, pues su estilo arquitectónico es ecléctico y denota una gran influencia china. El interior es bastante austero y posee tres naves, separadas por altas columnas e iluminadas por coloridos vitrales.

Otro punto interesante se encuentra en el Museo Mazamitla, dentro del Mercado de Artesanías, donde pueden adquirirse los tradicionales juguetes mexicanos como futbolitos de madera, trompos, yoyos y camioncitos, y souvenirs como caballitos, tazas conmemorativas y llaveros. En la parte del museo, se pueden admirar algunas piezas prehispánicas de alfarería y piedra tallada elaboradas por los primeros habitantes de esta región boscosa de Jalisco, así como los alimentos que se acostumbran desde tiempos inmemoriales, que cuentan la historia de este Pueblo Mágico.

Lo imperdible en Mazamitla Pueblo Mágico

En Mazamitla se cuentan historias de bandidos de la época de la Colonia como Martín Toscano y también de los Cristeros, por lo que la gente narra que aún se encuentra tesoros escondidos entre cuevas resultado de aquellos atracos. Estas historias invitan a explorar los senderos de la Sierra del Tigre, desde donde la panorámica es un espectáculo bello y sorprendente.

La cascada El Salto, en el fraccionamiento Los Cazos, es un bonito paraje; el recorrido al lugar se puede hacer a caballo hasta pocos metros antes de la caída de agua. Los alrededores de esta cascada son propicios para la práctica de deportes extremos como bicicleta de montaña, volar en parapente, conducir un cuatrimoto o un vehículo 4X4 todo terreno.

Otra belleza de mazamitla es el impresionante Lago de Chapala, el más grande de la República Mexicana, que ha atraído a miles de turistas en el último siglo. En sus alrededores, pueden disfrutarse apacibles días de campo en compañía de amigos y familiares.

Los bosques de Mazamitla inspiraron a sus habitantes para crear y mantener el Parque Ecológico Mundo Aventura, cuyo principal atractivo es el puente colgante "11 Hermanos" que tiene un largo de 350 metros y una altura de 150 m, que lo vuelven más grande que el Capilano de Vancouver, Canadá, considerado como uno de los mas grandes en el mundo. En este lugar la adrenalina se vive al máximo, pues también hay tirolesa, motos, rappel, escalada y gotcha.

Mazamitla guarda importantes tradiciones; a lo largo del año se celebran diversos festejos populares y religiosos. Las fiestas de la fundación del pueblo se realizan en el mes de marzo; la fiesta de San Cristóbal, su santo patrono, en la segunda semana de julio; y en el mes de octubre, se realiza una feria que tiene como tema la flora del municipio, adoptando como símbolo la amapola silvestre.

Qué comer en Mazamitla Pueblo Mágico

El Mercado de Antojitos de Mazamitla es el lugar ideal para probar delicias como las gorditas, el menudo, la birria o los sopes, así como platillos tradicionales como "el bote", que se prepara con carne de cerdo, pollo y res, y bebidas como el "pajarete", de leche recién ordeñada con chocolate y un toque de alcohol. En el centro, existen numerosos restaurantes como La Posada Mazamitla o El Charco, que ofrecen desde los platos más típicos hasta cocina de autor.

Qué comprar en Mazamitla Pueblo Mágico

Además del mencionado Mercado de Artesanías, en la calle Hidalgo se encuentran varias tiendas que venden plantas y productos típicos como dulces, conservas, mermeladas, cajetas y quesos.

Para dormir en Mazamitla Pueblo Mágico

Mazamitla cuenta con una amplia oferta hotelera para todos los bolsillos. Uno de sus principales hoteles es el Huerta Real, un lugar donde la naturaleza, el color de lo mexicano, el olor de la huerta y la tierra mojada se fusionan, brindando un hermoso y relajado ambiente. Otra excelente opción para quedarse a seguir disfrutando de las bellezas y eventos culturales del Pueblo Mágico es el Hotel de Montaña Bosque Escondido, en cuyas cabañas pueden vivirse idílicas tardes al calor de sus chimeneas o ante la majestuosa vista de sus terrazas.

A parte de estas dos opciones, existe una amplia oferta de cabañas en Mazamitla, las principales ventajas de reservar una cabaña en la montaña en Mazamitla son: el hospedarse en plena naturaleza con toda la familia, lo que suele reducir el coste del viaje y poder cocinar sus propias comidas a su propio ritmo. 

Sin mencionar la posibilidad de disfrutar de una rica carne asada o un tranquilo baño en familia, ya que como se puede ver en cabañasen.com, muchas de las cabañas listadas cuentan con parrilla, bañera de hidromasaje y/o piscina privada.